Antes se llamaba Sadomasoquismo o simplemente Sado al gusto por las prácticas eróticas y juegos sexuales relacionadas al dolor, la sumisión, la humillación y el sometimiento que tuvo su mayor difusión durante los años 20 en Berlín y en los años 40 por el Movimiento Leather y que estuvo en la clandestinidad por muchos años hasta que Internet permitió el acercamiento entre practicantes de varios juegos tras el cambio en 1987 de la clasificación de las enfermedades mentales y las perversiones pasaron a llamarse parafilias o Prácticas de Sexualidad Alterna dando una mayor difusión a este tipo de sexualidad por medio de la pornografía casera, aunque seguía causando morbo el ver lo que para mucho era sexo sucio (dirty) o vulgar (raunchy), más si era entre mujeres o si la mujer realizaba el rol de Dómina en que humillaba sexualmente a un hombre, aunque siendo la mujer la sometida era un rol inofensivo impulsado por clásicos del erotismo desde los años 70 como Garganta profunda o Emmanuelle, mientras que la pornografía homosexual se había alimentado con imágenes de Tom of Finland, la fotografía trangresora de Robert Mapplethorpe y el aotoerotismo fetichista de Peter Berlin, dando origen a la iconografía del juego entre satín negro, cuero o látex que se hará popular con el Heavy Metal y otras posturas trasgresoras hacia el sexo.

En los años 90, ya establecida una nueva generación bajo sus reglas y posturas, fue que aparecieron los primeros grupos de practicantes (jugadores) de BDSM, donde Bondage (atar o someter), Disciplina, Dominación, Sumisión, Sadismo y Masoquismo eran la forma de agrupar a los participantes de estas prácticas y asumiendo una serie de principios que se llamó SSC (Sano, Seguro y Consensuado) permitiendo que muchos interesados encontraran en esos grupos y clubes fetiche la forma de realizar sus fantasías eróticas bajo un ambiente controlado pero libre de mirones (morbosos) que solo lo vieran por diversión personal y no en una actitud de aprender y conocer a otros que tenían el mismo interés.

El BDSM como se ha ido popularizando por diversos medios es muchas veces solo la manera de experimentar una fantasía que se tiene con la pareja, desde complacer alguna postura o práctica sexual exótica a tener un juego de poder en que se pueda prescindir de otros elementos y explorar más allá de lo convencional de una relación sexual monógama y exclusiva (vainilla) que algunos frenan al no tener el mismo interés de su pareja o el rechazo completo del mismo, causando una gran frustración y que varios practicantes sean todavía “de clóset” al asistir de forma anónima a una práctica que puede llevar a tener una relación alterna donde no hay sexo ni interés emocional pero sí un deseo de aprender y fomentar la exploración del propio erotismo.

Si bien muchos han comprado la idea de que con un disfraz y tener actitudes de “maldad” más bien infantiles se es ya un practicante serio de BDSM, el Medio Sado, como también se le conoce, es capaz de adaptar ciertos espacios donde se separan los simples fisgones de los verdaderamente interesados en explorar esa parte de su interés erótico, dejando que los morbosos se agrupen en un medio alterno o pseudo que provee de espectáculos y performances semi pornográficos pero totalmente inocuos y bastante ingenuos sobre lo que se cree es una actitud trasgresora o, como lo definiría Madonna sobre el fenómeno de Las cincuenta sombras “pornografía para señoras insatisfechas en sus 40”, aunque tuvo un único acierto al acercar a las mujeres a pedir y negociar un cambio en su vida sexual y diferenciar lo perverso de lo violento y estar más atentas a cómo tener el control y evitar el abuso que consideraban normal en una relación de noviazgo.

El 24 de julio (24/7) es la fecha alrededor de la cual se realizan diversas fiestas y reuniones temáticas y de práctica sobre BDSM organizadas por los grupos de practicantes, siendo los números de la “relación óptima” de tener un vínculo absoluto y vivir dentro de una fantasía las 24 horas los 7 días de la semana, aunque muchos usan más bien el tema para el fetichismo y vestir de forma trasgresora en cuero o látex, lo cual está bien si se desea relajar un poco, aunque el Día del Fetichsimo es el tercer viernes de enero.

 

Buen y perverso mes de julio.